sábado, 25 de octubre de 2008

Volvieron a marchar en defensa del Mercado del Norte

Como el viernes anterior, unas 300 personas realizaron ayer una protesta en la Plaza Independencia, frente a la Casa de Gobierno. Pidieron por sus puestos de trabajo y reclamaron una audiencia.

Anoche, unas 300 personas llegaron a la Plaza Independencia en defensa del Mercado del Norte. Puesteros, empleados, agrupaciones políticas y familias enteras habían salido desde el edificio ubicado en calle Mendoza y Maipú y marcharon acompañados por el sonido de bombas, bombos, cacerolas y cornetas. Como el viernes pasado, protestaron contra el proyecto de transformar el Mercado en un shopping.

En motos, autos, bicicletas o a pie entraron a la plaza por calle 24 de Septiembre. Llevaban carteles y banderas argentinas. Al llegar a la Catedral rezaron todos juntos un Padre Nuestro para pedir por sus puestos de trabajo. Además, repartieron folletos explicando la situación.

Según los comerciantes, son 1.200 las familias que trabajan en el Mercado. Reclaman una audiencia con el intendente de la Capital, Domingo Amaya, a quien exigen ser incluidos en los planes del municipio para la construcción del moderno centro comercial.

Pedido de diálogo
"Vamos a seguir marchando todos los viernes en defensa del Mercado. Queremos que la sociedad entienda nuestra situación", expresó Ramón Nieva, quien tiene un puesto de venta de pollos. "Antes era de mi padre. Yo prácticamente me crié en el Mercado, y ahora tengo tres hijos trabajando ahí también", comentó. Según Nieva, el proyecto, que implica desalojar a los puesteros para construir un shopping, "es un negociado". "Nosotros queremos realizar las remodelaciones que hacen falta, pero no nos dejan. Nunca tuvimos una reunión con el intendente Amaya. Si no hay diálogo no se va a poder solucionar nada", añadió, y dijo que la Justicia será la encargada de resolver el conflicto, ya que, según Nieva, hay un contrato marco firmado que les otorga la concesión hasta 2010. Además, el puestero explicó algunos de los proyectos que hay: "queremos remodelar los baños, que son de toda la comunidad, no sólo de quienes trabajan en el mercado. También queremos remodelar los frentes de los negocios y uniformar las marquesinas", afirmó.

"Parte de la sociedad"
Por su parte, Catalina Banegas contó que trabaja en el Mercado desde hace 25 años. "Queremos seguir trabajando", expresó, y dijo que además de defender sus empleos, luchan por mantener un edificio histórico que "es parte de la sociedad tucumana". "Es una parada típica. ¿Quién no ha pasado por el mercado y se ha llevado algo?", preguntó.

"Histórico edificio"
"Venimos por segunda vez a esta histórica plaza para reclamar por nuestros derechos", dijo uno de los puesteros al tomar la palabra cuando los manifestantes se detuvieron frente a la Casa de Gobierno luego de dar dos vueltas a Plaza Independencia.

"No se nos ha permitido realizar las obras para remodelar la construcción. Si se construye un shopping se le quitará a los vecinos el derecho de gozar de este histórico edificio que data de 1853", añadió el comerciante.

Después, con el sonido de su voz aumentado por un megáfono, dijo: "Pueden hacer los shoppings que quieran, pero no se metan con el mercado, que es del pueblo tucumano". Las palabras fueron recibidas con aplausos y gritos de apoyo. "Dudamos que exista un tucumano que no haya probado uno de los productos frescos que se ofrecen en el mercado. Dios y la Justicia tendrán la última palabra", agregó.

Luego, el puestero acusó al gobierno municipal de haber sido muy perverso. "Se dijeron muchas cosas en los medios para hacernos quedar mal frente al resto de la sociedad tucumana", comentó, y añadió: "no queremos confrontar con nadie, pero están en peligro el alimento y la educación de nuestros hijos".

Finalmente, el puestero agradeció el apoyo brindado "para la continuidad del mercado".

A continuación se leyó un texto redactado por miembros del Partido Obrero, en el que se denunciaba que "el gobierno busca hacer un negociado a costa del trabajo de miles de personas, bajo el argumento de que el Mercado sólo trae pérdidas y es un edificio viejo".

Después del texto se cantó el Himno Nacional y otro de los dueños de un local tomó la palabra. Se quejó porque el gobierno había llamado "usurpadores" a los puesteros y reiteró el pedido de mantener los puestos de trabajo.

En la marcha participaron la Asociación de Puesteros, el Partido Obrero, el Consorcio del Mercado del Norte, el Movimiento de Jubilados de la Plaza y la Juventud Democracia Cristiana.