sábado, 12 de abril de 2008

Frente opositor en Córdoba

Los diputados y senadores nacionales del Frente Cívico (Luis Juez), de la UCR de Córdoba y del PS de Córdoba, y del ARI se están reuniendo en San Francisco para formar un frente opositor a partir del apoyo a la reclamación del ruralismo de que se anulen los aumentos recientes a las retenciones agropecuarias.

Es la primera cristalización política del reciente lock out agropecuario. Esta tentativa da por tierra con la intención original del partido socialista de "ser alternativa y no oposición", que fue aprobada en el reciente congreso del PS para preservar a la gobernación de Binner de un choque con el gobierno nacional, sin que esto implicara el inmovilismo del partido. La única forma de conciliar la reducción de las retenciones con una estabilidad de los precios internos sería proceder a la revalorización del peso y al llamado ‘enfriamiento' de la economía. Es lo que reclama en forma insistente la Coalición Cívica de Elisa Carrió, que sin embargo no se hará presente en San Francisco. La presencia del socialismo en Córdoba acentúa la crisis de la filial bonaerense, a la que los kirchneristas Rivas y Basteiro quieren convertir en fortín del oficialismo gubernamental. Si esta tentativa tuviera éxito, se produciría una división del partido y su definitivo pasaje a la oposición a nivel nacional; el partido socialista volvería a disgregarse en función de alternativas ajenas al socialismo. Aunque Carrió no se hace presente en Córdoba, está fogoneando abiertamente el frente. Carrió ya declaró su disposición a secundar a Binner en una fórmula presidencial.

Este frente de centro-derecha-izquierda nace plagado de contradicciones. Un frente político basado en el capital agroexportador afectaría a intereses industriales protegidos por el peso subvaluado. Debería basarse en la ‘carta china', o sea apertura a las exportaciones asiáticas y a sus inversiones (como las que Macri ha anudado con capitales chinos para el Belgrano-Cargas) a cambio de una multiplicación de las exportaciones argentinas. El eje San-Cor reclama una ruta interoceánica para llevar al continente asiático. Semejante rumbo despegaría a Argentina del Mercosur. Asistimos, en definitiva, a un momento de definiciones estratégicas de la ‘burguesía nacional' y de la extranjera que opera en el país.

El frente opositor es un signo de fractura en la base social del Estado. El lugar reservado a los trabajadores, en esta fractura, es el de furgón de cola de unos y otros. Fue lo que se vio durante el conflicto agropecuario.

Aunque convidada de piedra en esta fase de la crisis, por la política de sus direcciones, no puede ser ajena a ella y lo será cada vez menos en las siguientes, por la razón de que se trata de una crisis de conjunto. Este rol subalterno del proletariado se manifiesta en toda América Latina, pero la reciente crisis con Sidor, en Venezuela, debido al impasse con el convenio colectivo de trabajo, es un síntoma de que las cosas están cambiando. América Latina y Argentina no pueden sustraerse a las dimensiones y consecuencias de un nuevo período histórico.

Christian Rath - Jorge Altamira
11 de abril de 2002