sábado, 19 de septiembre de 2009

Los autoconvocados mantienen firme el paro por tiempo indefinido y el próximo lunes instalarán una “carpa blanca” frente a la Casa de Gobierno.

Los médicos endurecen la protesta e instalarán una carpa

Los autoconvocados mantienen firme el paro por tiempo indefinido y el próximo lunes instalarán una “carpa blanca” frente a la Casa de Gobierno.

El conflicto salarial que enfrenta al Poder Ejecutivo y a los médicos y empleados autoconvocados de la sanidad desde hace un mes y medio, dejando sin atención a los pacientes que concurren a los consultorios externos y a quienes tienen cirugías programadas, transita por un oscuro callejón sin salida. En medio de esta "pulseada" entre las partes, con los profesionales dispuestos a pelear hasta las últimas consecuencias por una recomposición salarial y el Gobierno cerrado en el discurso de que "no hay plata", la paz social en la provincia comienza a alterarse cada vez más.
Los autoconvocados de la salud, quienes esta semana iniciaron un paro por tiempo indefinido, con asistencia a los lugares de trabajo, resolvieron endurecer el plan de lucha: El próximo lunes, en coincidencia con el Día de la Sanidad, instalarán una "carpa blanca" frente a la Casa de Gobierno, donde desarrollarán distintas actividades de protesta, como "ollas populares" y recitales, y solicitarán el apoyo de la comunidad.

"Marcha negra"
En principio, la intención de los manifestantes es acampar en la plaza Independencia hasta el próximo miércoles, cuando, a partir de las 11.00 concretarán "una marcha negra" que recorrerá las inmediaciones de la Casa de Gobierno y de la sede legislativa de calle Rivadavia primera cuadra. No obstante, el sector no descartó la posibilidad de mantener la carpa "por el tiempo que sea necesario, hasta obtener una respuesta favorable del Ejecutivo" a sus reclamos, según advirtió a EL SIGLO Gustavo Arquez, vocero de los autoconvocados y directivo del Colegio Médico.
Así fue resuelto ayer, durante una asamblea con la presencia de delegados de los hospitales y CAPS de toda la provincia, realizada en el edificio del Centro de Salud.En el plenario se acordó que el miércoles 23, para facilitar la asistencia de los trabajadores de la sanidad a la "marcha negra", donde todos llevarán distintivos negros, en señal de luto por la crisis de la salud, el paro será sin asistencia a los lugares de trabajo. Las actividades de ese día estarán enmarcadas en una huelga nacional convocada por la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la Republica Argentina (FESPROSA) y que tendrá como uno de sus ejes principales el respaldo a la lucha de los profesionales tucumanos. A la movilización, se adherirán la CGT y la CTA.

Piquete médico
Arquez informó que en la asamblea de ayer "también se aprobó realizar el próximo viernes, por pedido de personal de Santa Lucía y teniendo en cuenta que se viene un fin de semana largo, un corte de tránsito intermitente en la ruta 38, en el empalme con la ruta 307, que conduce a los valles". Además, señaló que "se dispuso que a partir de la próxima semana comenzarán a realizarse asambleas, ollas populares y movilizaciones en los hospitales cabeceras de toda la provincia, como por ejemplo en Alberdi, Famaillá, Concepción, Aguilares, con la presencia de delegados de toda la provincia". Otro de los puntos resueltos en el plenario de ayer es avanzar con la integración de "un fondo de huelga solidario", que permitiría paliar la situación de los profesionales y empleados de la salud en caso de que el Gobierno concrete nuevos descuentos de haberes en represalia por los días de huelga. "Se solicitará colaboración a distintas empresas y también a la comunidad para financiar ese fondo, porque existe la posibilidad cierta de que el Ejecutivo siga confiscando los sueldos de la sanidad", señaló Arquez.
Los autoconvocados también resolvieron remitirle al arzobispo de Tucumán, Luis Villalba, quien oficia de mediador en el conflicto, un escrito explicando los motivos del rechazo del sector al ofrecimiento realizado por el Gobierno el martes último. "Le transmitiremos a monseñor Villalba nuestra decisión, agradeciéndole por ofrecerse como nexo con las autoridades y reafirmando nuestra voluntad de seguir dialogando, a la espera de que se convoque a una nueva reunión en el Arzobispado la próxima semana", precisó Arquez.

Ofertas y contraofertas
Como se recordará, martes pasado, en una reunión realizada en el Arzobispado, los ministros de Economía, Jorge Jiménez, de Gobierno, Edmundo Jiménez, y de Salud, Pablo Yedlin, ofrecieron a los autoconvocados un aumento de 20 pesos en la base de cálculo salarial (llevándola de 250 a 270 pesos) y la ampliación del pago del ítem Responsabilidad Médica a todos los profesionales encuadrados en el nivel A.
El sector rechazó terminantemente la propuesta, por considerarla insuficiente, y elevó una contraoferta exigiendo que el aumento en la base de cálculo sea del 100 por ciento, elevándola a 500 pesos.
Además, reclaman la titularización de 3 mil contratados antes de fin de año, el nombramiento en planta permanente, post mortem, de dos enfermeras fallecidas recientemente, aparentemente, como consecuencia de la gripe A, la devolución de los haberes descontados por el Gobierno, el pago del 82 móvil a los jubilados de la actidad y el ítem de Insalubridad.
Arquez aseveró que "el espíritu de lucha sigue firme y el reclamo de esas reivindicaciones es inclaudicable. Estamos decididos a llegar hasta las últimas consecuencias en esta pelea por la dignidad de la sanidad", sentenció.
El dirigente advirtió que si no hay respuestas oficiales a esos planteos "no se descarta la posibilidad de endurecer las medidas de fuerza".
A propósito, comentó que en la asamblea de ayer "el personal de algunos hospitales lanzó la propuesta de concretar una renuncia masiva de todos los médicos y empleados enrolados en los autoconvocados. También, en caso de que el conflicto no se resuelva en el corto plazo, se propuso paros diarios y escalonados de dos horas en las guardias", añadió.

"No hay plata"
¿Cómo se hace para destrabar el conflicto con los médicos?, se le preguntó ayer al gobernador José Alperovich, a lo cual éste respondió de manera tajante: "No se...más de lo que hemos hecho no vamos a hacer, no hay plata". De ese modo, el titular del Poder Ejecutivo descartó la posibilidad de que en las próximas horas surja una nueva oferta salarial a los profesionales.